Los brownies, esos maravillosos bloques de chocolate llenos de amor, tienen un interesante origen que se remonta a la América de finales del siglo XIX. Te traemos la historia de sus orígenes, algunos datos desconocidos y consejos para hornear el brownie perfecto.
Los brownies, esas pequeñas maravillas de chocolate que se han ganado el corazón de los amantes de los dulces de todo el mundo, tienen sus raíces en Estados Unidos. Como es bien sabido, la receta de los brownies apareció por primera vez en los libros de cocina estadounidenses a finales del siglo XIX. Su origen está envuelto en varias leyendas. Una teoría afirma que fue un resultado involuntario al añadir muy poca harina al pastel de chocolate. Otra leyenda habla de un esfuerzo por crear un postre que no necesitara levadura de fermentación. También existe la historia de un pastelero de Chicago que creó brownies a petición de la esposa del propietario de un hotel de lujo.
Independientemente de su verdadero origen, los brownies se convirtieron rápidamente en un icono de la cocina estadounidense y su popularidad se extendió por todo el mundo. Lo que hace que los brownies sean tan populares es su sencillez de preparación, que sólo requiere unos pocos ingredientes básicos. Sin embargo, hay un truco: el tiempo exacto de horneado. Para que queden blandos y jugosos, los brownies no deben hornearse demasiado. Esta consistencia húmeda es lo que diferencia a los brownies perfectos de los mediocres.
También hemos añadido algunos consejos para conseguir la consistencia perfecta: deje enfriar los brownies en la nevera durante al menos una hora antes de cortarlos. Esto les dará aún más jugosidad y el sabor será más intenso. Además, experimente añadiendo distintos frutos secos o pepitas de chocolate para conseguir una textura y un perfil de sabor más interesantes.
Brownies
Preparación: 40 minutos
Ingredientes:
- 185 g de mantequilla
- 185 g de chocolate negro de buena calidad (mín. 70%)
- 85 g de harina común
- 40 g de cacao
- 50 g de chocolate blanco
- 50 g de chocolate con leche
- 3 huevos grandes
- 130 g de azúcar
Preparación:
- A fuego muy lento y sin dejar de remover, derretir lentamente la mantequilla junto con el chocolate negro.
- En un bol, batir los huevos y el azúcar hasta que estén espesos y espumosos. Añadir poco a poco el chocolate y la mantequilla derretidos.
- Tamice la mitad de la harina y el cacao en la mezcla. Remover y añadir el resto de la harina.
- Pica el chocolate blanco y el chocolate con leche en trozos pequeños y añádelos a la masa.
- Forra una fuente de horno más pequeña con papel pergamino, vierte la masa y usa una espátula para estirarla hasta los bordes.
- Hornea a 180 °C durante 20 minutos.
- Retira los brownies terminados y el papel de horno de la bandeja y déjalos enfriar durante al menos 2 horas para que se endurezcan. A continuación, córtelos en dados y sírvalos solos, con helado o salsa de frutas.
También puedes añadir a la masa avellanas, almendras, cacahuetes o frutos secos picados.
