Con la temporada más fría ya terminada y la primavera en pleno apogeo, ha llegado el momento de proceder con el tradicional cambio de armario estacional, dejando a un lado las prendas más pesadas para dejar espacio a las más ligeras. A continuación se ofrecen algunos consejos sobre cómo proceder con esta operación.
La organización
La base de todo es la organización: evitar el caos y la confusión en el armario no es misión imposible, lo importante es proceder con orden. Simplemente siga cuatro sencillos pasos:
- vaciar el armario por completo;
- separar las prendas, bolsos y accesorios que se deben guardar de los que se deben colocar en el armario;
- elegir ropa que ya no sea necesaria por ser inútil o vieja;
- Organice los artículos que se almacenarán en cajas especiales.
La limpieza
El armario debe limpiarse cuidadosamente antes de proceder a su organización. Una vez vaciada la ropa que ya no sirve por el cambio de estación, antes de volver a llenarla hay que higienizarla, mejor si con ingredientes naturales como bicarbonato de sodio y limón. Una vez realizada esta operación, solo recuerda insertar unas bolsitas perfumadas después de colocar las nuevas prendas.
Las herramientas imprescindibles para ordenar
Para ordenar el interior del armario podemos utilizar algunos complementos, como el organizador, útil si quieres poner a la vista algunas prendas que utilizamos con más frecuencia, o el modelo escalonado, ideal si buscas homogeneidad en el armario.
Luego están los porta ropa, capaces de aportar orden y limpieza de una sola vez, sin olvidar su papel fundamental en la limpieza de las distintas prendas. Otras dos soluciones alternativas son los separadores, que acaban con el caos en los cajones, y los cajones debajo de la cama, que protegen de la humedad.
Otras soluciones ingeniosas
Estas otras posibles soluciones:
- bolsas de vacío: una simple aspiradora basta para eliminar el aire de estas bolsas que compactan al máximo el volumen de cualquier prenda, protegiéndola de la suciedad y posibles daños;
- perchas: atemporales y adecuados a cada necesidad, son perfectos para ordenar el armario. Las hay de varios tipos, como los modelos de perchas para pantalones, las de madera, sólidas y resistentes, y las de plástico, económicas y ligeras;
- tubos para perchas: son auténticas varillas de metal que permiten colgar prendas más pesadas como chaquetas, abrigos y faldas, evitando arrugas antiestéticas;
- desparramar: nunca parece haber suficiente espacio en el armario y con los percheros es posible combinar practicidad y diseño;
- armarios de lona: se pueden utilizar como un práctico armario, una alternativa a los armarios de madera y a los zapateros.