¿Has notado pequeñas manchas de moho en el baño o en la cocina, has raspado el negro, pero al cabo de un tiempo la mancha se ha reformado o más bien ha crecido? A continuación se ofrecen algunas indicaciones para eliminarlo de forma permanente. Antes que nada, conozcamos a nuestro “enemigo”: el moho es un organismo y como tal se reproduce mediante .
Se forma en ambientes húmedos, mal ventilados o por condensación, por lo tanto principalmente en lugares húmedos de la casa, baños o cocinas, o durante inviernos especialmente lluviosos, incluso en los dormitorios, debido a
Adiós manchas de moho: eliminamos las esporas en tan solo unos pasos
La transformación de las esporas de moho en microorganismos es muy rápida. Se reproducen en apenas 48 horas y, además de las antiestéticas manchas de color negro verdoso que producen en las paredes encaladas, provocan a la larga muchos daños a la salud.
De hecho, su inhalación provoca síntomas que muy a menudo se atribuyen a la alergia al polen y, en cambio, son provocados por su presencia masiva en los hogares. ¿Cómo podemos tratar esta “infestación” de esporas de moho? Veamos los productos más eficaces, algunos de estos se utilizan habitualmente en todos los hogares.
Como primera acción, ya que tendremos que utilizar productos irritantes, con guantes, gafas protectoras y mascarilla, luego nos ponemos un traje o ropa que no nos importe que se manche y nos ponemos:
-
Cubo de plástico
- una botella de spray vacía
-
Esponja
-
Paño de microfibra
-
tazas medidoras
- cepillo de cerdas suaves
Ahora te desvelamos el producto más adecuado para combatir la reproducción de esporas de moho y prevenir la colonización de la pared y la reaparición de manchas: preparamos la parte a tratar humedeciéndola, luego preparamos una solución de media taza de , un cucharada de líquido para lavar platos y una taza de agua tibia. Echamos todo en el bote vacío y pulverizamos bien sobre la zona molesta, cepillando con el cepillo plano y el paño de microfibra, empezando de abajo hacia arriba.
Recomendamos no raspar el moho, porque esta acción esparciría las esporas por todas partes. La lejía tiene un efecto y además no arruina el color de la pared. Asegúrese de ventilar bien la habitación tanto al aplicar el producto como después para permitir que la pared se seque bien. Si quieres puedes ayudarte del secador de pelo.
Nunca mezcles lejía con otros productos como amoníaco o vinagre blanco, ya que desprenderán humo. Si no te gusta especialmente la lejía, puedes probar el “método de la abuela”: utiliza bicarbonato de sodio y sal fina y agua tibia a partes iguales y vierte la solución obtenida en el pulverizador habitual, mojando bien la pared como se describió anteriormente y dejar secar bien al aire. Le recordamos contactar con un profesional si hay infiltraciones en las paredes y aparece moho en grandes superficies de difícil acceso, para evitar daños más graves a la estructura y a su salud.