Tener uno junto al mar te permite disfrutar de unos días de completo relax lejos del frenesí del día a día. Estas viviendas, sin embargo, requieren un cuidado especial, ya que sólo se utilizan durante breves periodos del año. Se debe prestar especial atención a salinidadque afecta principalmente a marcos de ventanas y cristales, solidificándose y creando molestas marcas blanquecinas.
Veamos cómo restaurar ventanas a su nueva condición en unos pocos pasos y con algunas pequeñas precauciones.
Calendario
Los marcos, al estar más expuestos, acumulan arena y sal. Para eliminar la suciedad, primero debes quitar la El exceso de polvo con ayuda de un paño de microfibra o plumero. Una vez hecho esto, se puede proceder a la limpieza propiamente dicha, cuya elección del detergente depende en gran medida del material del marco:
- cloruro de polivinilo: resistente a los agentes atmosféricos, este material es fácil de limpiar. Simplemente diluya unas gotas de detergente para platos en un balde de agua tibia. Debido al sol y la sal, los marcos pueden volverse amarillos: para que queden como nuevos puedes preparar una mezcla con un litro de agua, 3 cucharadas de agua oxigenada de 40 vol, 2 cucharadas de bicarbonato de sodio y media cucharadita de plato. detergente . Una vez aplicado sobre toda la estructura se debe dejar actuar durante 30 minutos. Pasado este tiempo solo queda enjuagarlo con abundante agua y secarlo;
- aluminio: al igual que el PVC, este material también se puede limpiar fácilmente con jabón de Marsella. Además del marco, también debes cuidar la cerradura, ya que las incrustaciones de sal podrían estropearla con el riesgo de que ya no cierre correctamente;
- madera: este material, aunque resistente, necesita más atención. Para eliminar la suciedad, utilice un paño de microfibra húmedo sobre el que verter unas gotas de jabón de Marsella. Una vez limpia, se puede comprobar el estado de la pintura: si está dañada hay que tratarla con productos específicos.
Cómo limpiar vidrio de sal
Después de limpiar los muebles podemos pasar al cristal. Para evitar la formación de halos provocados por la exposición a la luz solar directa, recomendamos realizar esta operación a primera hora de la mañana o al atardecer.
Primero debes eliminar el exceso de polvo, luego puedes pasar a limpiar las ventanas con productos naturales. Una solución muy eficaz es diluir media cucharada de jabón para platos o jabón corporal en un balde de agua tibia. En unos minutos y enjuagando cuidadosamente con abundante agua, se eliminará todo rastro de grasa.
Alternativamente, puedes crear una mezcla compuesta por un vaso de vinagre blanco diluido en medio litro de agua caliente. Pulverizado sobre los cristales eliminará incluso la suciedad más resistente.
Entre los métodos para tener el cristal limpio y sin rayas también está la patata cruda. Cortado por la mitad, se debe pasar por la superficie para que absorba la suciedad, tras lo cual solo queda enjuagar con abundante agua caliente y secar con un paño de microfibra.